Enfermera y enfermero con una sonda

Tratamientos en el cáncer de mama metastásico

Es posible que los médicos difieran en cuanto a las terapias a emplear en cada paciente. Conocé las opciones de tratamiento.1

Cuando se trata de cáncer, los médicos de las diferentes especialidades trabajan juntos para crear un plan de tratamiento completo que incluye distintos enfoques. Además de los médicos, hay otros profesionales de la salud en estos equipos, como enfermeras/os, trabajadores/as sociales, farmacéuticos/as y dietistas. Esto se conoce como un equipo multidisciplinario.1

Los objetivos principales del tratamiento para el cáncer de mama metastásico son prolongar la vida con la enfermedad, minimizar los efectos secundarios del cáncer y su tratamiento, y mejorar la calidad de vida. Aunque no existe una cura para el cáncer metastásico, es posible mantener una buena calidad de vida durante meses o incluso años.1

¿Y qué sabemos sobre los tratamientos?

Una vez que se completen las pruebas, se discuten las opciones de tratamiento disponibles. A su vez, el plan de atención también abordará el manejo de síntomas y efectos secundarios, lo cual es fundamental en el cuidado del cáncer. Las opciones pueden ser:1

Estos tratamientos pueden usarse individualmente o combinados, dependiendo de la situación del paciente. Los medicamentos pueden cambiar de acuerdo a la respuesta del cuerpo al tratamiento.

La quimioterapia puede complementarse con otros tratamientos, como terapias dirigidas a ciertos tipos de cáncer de mama. Los efectos secundarios varían según la persona y el tipo de medicamento utilizado, pudiendo incluir fatiga, riesgo de infecciones, náuseas, pérdida de cabello y otros. Estas reacciones suelen ser controlables y disminuyen una vez finalizado el tratamiento.

A pesar de los efectos secundarios, muchas personas continúan con su vida cotidiana normal durante la quimioterapia, aunque las experiencias pueden variar.

Hay diferentes tipos de terapias dirigidas:

Como cualquier tratamiento, la inmunoterapia puede tener efectos secundarios, que pueden variar según el paciente. Algunos efectos comunes incluyen reacciones cutáneas, síntomas similares a la gripe, diarrea y cambios en el peso.

Este tratamiento puede reducir el tamaño del tumor, frenar su crecimiento y aliviar los síntomas como el dolor. A veces se usa solo, pero también puede combinarse con la cirugía, especialmente para tratar el cáncer de mama que se ha extendido al cerebro.

La radioterapia sigue un plan específico, que incluye la cantidad y duración de los tratamientos. Los efectos secundarios pueden incluir fatiga y problemas en la piel, además de otros que dependen del tipo de radioterapia y la parte del cuerpo tratada.

En ocasiones, la cirugía, ya sea sola o combinada con radioterapia, puede ser una opción para tratar el cáncer de mama que se ha diseminado al cerebro. El objetivo es reducir o eliminar temporalmente el cáncer en el cerebro.

Es crucial informarse sobre las opciones de tratamiento y hacer todas las preguntas al médico tratante si hay algo que no se entiende. Además de comprender los objetivos de cada tratamiento, es importante saber qué se puede esperar durante el proceso. Estas conversaciones se conocen como "toma de decisiones compartida", donde el paciente y el equipo médico colaboran para elegir los tratamientos que mejor se adapten a las necesidades y objetivos de atención.1

Este material es de carácter educativo e informativo únicamente, no sustituye ni reemplaza la consulta médica, y en ningún caso deberá tomarse como consejo, tratamiento o indicación médica. Ante cualquier duda deberá consultar siempre a su médico tratante.

Referencias
  1. American Society of Clinical Oncology. “Cáncer de mama metastásico: Tipos de tratamiento”. Disponible en: https://www.cancer.net/es/tipos-de-c%C3%A1ncer/c%C3%A1ncer-de-mama-metast%C3%A1sico/tipos-de-tratamiento Consultado en Marzo 2023.

PP-UNP-ARG-1282